El espectacular comportamiento de los mercados emergentes (+34% en 2017), ha hecho que en estos primeros compases de año, la gran mayoría de los analistas sigan con la mirada puesta en ellos.

 

La pregunta es obvia, ¿seguirá la buena evolución en los mismos?

 

Si nos fijamos en datos de análisis fundamental, el menor PER de éstos, en comparación con los mercados desarrollados, Europa y EEUU, ya para empezar es un signo positivo.

Según Bloomberg, se  espera que los beneficios sigan creciendo, bajando más aún el PER de cara a 2018. Unos incrementos del 17% frente a un 11% en EEUU o un 9% en Europa.

Haciendo una lista de países más baratos por PER encontramos  a Rusia con un PER 7, Brasil 14,5 veces, China 15 veces.

¿Qué desafíos tienen por delante?

 

México

 

Dos grandes acontecimientos políticos contribuirán a definir el año 2018 para México. Por un lado, la renegociación del Tratado de Libre Comercio y por otro lado, internamente, el país celebrará elecciones presidenciales en julio y las encuestas locales actualmente favorecen a un candidato que se considera hostil a los mercados. Los resultados de ambos acontecimientos pueden correlacionarse; un acuerdo exitoso del TLCAN reduciría la probabilidad de que Andrés Manuel López Obrador triunfe, y viceversa. Sin embargo, se espera que la economía mexicana muestre resistencia a los shocks, y tenga un crecimiento del 2.2% del PIB en 2018, comparado con el 2.3% de este año.

 

Brasil

 

Después de una recesión de tres años, la economía brasileña ha comenzado a crecer de nuevo y está a punto de acelerarse en 2018. Su prometedor sector inmobiliario, mayores reformas, mayor confianza política y una política monetaria que redujo a la mitad los tipos de interés. El gobierno también logró promulgar reformas significativas, incluyendo el tope de gasto y las leyes del mercado laboral. Sin embargo, la situación fiscal de Brasil sigue siendo tan preocupante que el próximo gobierno no tendrá más remedio que ocuparse de ella.

 

Rusia

 

Muy buen comportamiento el experimentado por la economía rusa, teniendo la mayor evolución prolongada en casi dos décadas este año. Las mayores ventas al por menor y una mejora en los salarios impulsaron el consumo, mientras que la inversión se recuperó, en parte debido al incremento de gasto en infraestructura por eventos como la celebración del mundial de fútbol en  2018. Por otro lado, la inflación ha caído por debajo del objetivo del 4% fijado por el Banco Central, lo que ha provocado una reducción de las tasas de interés. Junto con unos precios de la energía ampliamente estables, se espera un crecimiento económico real de alrededor del 2% en 2018.

 

Asia Pacífico

 

En Asia, Malasia y Tailandia celebrarán elecciones generales en el próximo año. India e Indonesia celebrarán las suyas en 2019.

Se espera que el crecimiento del PIB en Malasia se modere hasta el  5,3% en 2018, a partir del 5,6% de 2017. Esta desaceleración podría evitarse si el gobierno adelanta el gasto fiscal antes de las elecciones generales, que deben convocarse a finales de agosto. UMNO probablemente ganará, lo que implica una continuación de las políticas económicas actuales.

Indonesia e India seguirán con sus elecciones en la primavera de 2019, pero sus gobiernos tratarán de mantener contentos a los votantes mientras tanto. Las previsiones iniciales del PBI consensuado de 2017, fueron peor de lo esperado pero se espera un mejor crecimiento para este año. En Indonesia, la inversión pública ha tenido un crecimiento tal que ahora es poco probable que impulse aún más el crecimiento.

En la India, programas de reforma como los que se centran en el impuesto sobre bienes y servicios han lastrado el crecimiento económico este año, pero creemos que mejorarán las perspectivas del país a mediano plazo. Sin embargo, existe el riesgo de desequilibrios  fiscales en el período previo a las elecciones generales de 2019. Cualquier aumento del gasto populista probablemente apoyaría el consumo, pero retrasaría la recuperación del ciclo de inversión, lo que reduciría las perspectivas de crecimiento potencial.

 

Por tanto a modo de resumen, podríamos destacar que a pesar del buen comportamiento experimentado el año pasado, esperamos una buena evolución este año, debido al incremento de las ganancias de muchas empresas, incremento en términos de rentabilidad, márgenes y rendimiento del capital, después de la reciente presión a la que se vieron sometidas estas variables.

 

Y como potenciales riesgos, destaca el político ya que como hemos comentado habrá periodo electoral en varios países. Además, otro factor a tener en cuenta sería que China se desacelere significativamente o que se produzcan guerras comerciales. También debe tenerse en cuenta el efecto divisa que, como sucede con la Renta Fija, puede comerse parte de los rendimientos obtenidos.

 

Foto: Steve Long. Unsplash.